El director General de CeJuego elogia los más de 400 millones de euros en obras sociales de la ONCE durante su comparecencia en el Parlamento de Cantabria, pero subraya que los más de 1.200 millones de euros anuales que el juego de entretenimiento de titularidad privada reporta también tienen por destino un fin social vía Presupuestos.
Alegato de Landaluce a la formación y la prevención en el ejercicio humano de capacitar la confrontación con la pasión y la tentación. "El control de las pasiones es el mejor instrumento. Si prohibimos todo tipo de pasión, estamos convirtiendo una sociedad robótica".
Landaluce puso en valor los datos que muestran la ausencia de un problema de 'alarma social' por menores. Elogió el sistema de control de acceso porque "asegura un control eficiente, gracias a la tecnología". Y respecto de los menores reiteró que es falso atribuir a España un problema de juego y menores. "Los datos de ESPAD resaltan precisamente que "España es el segundo país de Europa donde los menores juegan menos y hay menores casos de juego problemático".
A propósito de la pretendida 'alarma social', precisó que "no es cierto que la oferta de juego haya aumentado. Lo que sí es verdad es que hay nuevas formas de juego porque se ha reconstruido la oferta. Ningún sector perdura igual tras más de 40 años porque se renueva". Por eso Landaluce apeló a los diputados de la Cámara cántabra a "no dejarse llevar por el ruido. Fíjense en los datos objetivos de Cantabria". Alusión que hizo extensiva al régimen de sanciones. "Incumplir debe dar lugar a sanción, pero éstas tienen que ser justas".
Respecto de las distancias señala que "es efectista aplicar una distancia respecto de centros juveniles, pero no son efectivas. La gente que acude a los locales de juego de titularidad privada lo hace para disfrutar y pasar un buen rato".