La Agencia Tributaria homologa indicadores, luego de un año 2022 caracterizado por una desviación muy negativa del ingreso de esta partida que concentra la recaudación de los premios de importes iguales o superiores a 40.000 euros repartidos por los operadores de lotería.
A 30 de noviembre de 2022 la cantidad reportada por esta partida relacionada con el IRPF fue de 335'41 millones de euros, guarismo inferior a los 335'62 millones contabilizados en el mismo período de 2021 (-0'1%).
En el ejercicio 2020, que se corresponde con el del confinamiento y mayor impacto por cierres y limitaciones, la cuantía ingresada por el capítulo se situó en 320'04 millones de euros. Si la comparación la establecemos respecto de la misma fecha de 2019, comprobamos que entonces el acumulado por las retenciones era bastante inferior: 326'83 millones de euros.
Las retenciones aplicadas a las loterías también tienen su componente por la vía del Impuesto de Sociedades. En este caso hasta noviembre de 2022 lo ingresado ascendía a 0'92 millones de euros, lo que significa una mejora interanual del 9'3% respecto de los 0'84 millones en esa fecha de 2021.
Desde 2018 los juegos de loterías quedan obligados a retener un porcentaje del cliente, siempre que el premio sea igual o superior a 40.000 euros. Una medida que desde Gestha, el sindicato de los técnicos del Ministerio de Hacienda, siempre ha sido causa de crítica y siguen reivindicando cambios en la normativa fiscal.
Recientemente nos hacíamos eco en JPNoticias de la petición un vez más a la Agencia Tributaria para que el Gobierno español reponga el mínimo exento de los premios de loterías a los primeros 2.500 euros "porque no hay justificación tributaria o económica para que no tribute una ganancia fruto del azar de 40.000 euros, y en cambio sí lo hace una prestación por desempleo o una subvención de 1.000 euros".