Kindred, que ya disponía del 33'4% del capital, prevé completar la operación en 2023 subordinando el abono de los pagos contraídos a los resultados y ganancias que acredite Relax Gaming.
La presencia de Kindred en Relax Gaming se remonta a 2013, es decir, apenas tres años después de la fundación del proveedor de software, diseño y desarrollos de juegos de casino, bingo y poker para el iGaming que cuenta con oficinas en Malta, Estonia, Suecia y Serbia.
La transacción de compra del 66'6% restante de Relax Gaming se estima en 320 millones de euros, cuyo primer pago tiene que formalizarse en próximas fechas por valor de 80 millones de euros, mientras que el resto queda sujeto a los resultados y beneficios que la adquirida obtenga en los próximos dos ejercicios fiscales.
La justificación por Kindred de la operación responde al deseo de colocar el foco en el producto y en la experiencia final del cliente como elementos que redundarán en capacidad de diferenciación respecto de la competencia.