El ímprobo ejercicio logístico de la organización Clarion vivió en la matinal inaugural una intensa prueba de esfuerzo saldada con notable alto, rozando el sobresaliente

Las líneas de metro más cercanas a Fira Barcelona acondicionaron una señalización llamativa y diáfana para evitar confusiones en el acceso al recinto ferial; en algunos casos con personal bilingüe para atender.

El despliegue policial de Mossos d'Esquadra y Guàrdia Urbana de Barcelona fue particularmente visible en los accesos en evitación de sorpresas indeseadas.

El aluvión de visitantes en el acceso entre las 10 y las 11 horas fue lo esperado desde la experiencia de Londres, pero en cualquier caso, bien gestionado porque no hubo incidentes en los tres cortafuegos creados para facilitar ordenadamente el acceso al recinto ferial.

Los cinco pabellones registraron una afluencia muy grande de visitantes procedentes de todos los destinos del globo. Para nada ha sido un handicap que la primera fecha de ICE fuera en lunes; buena parte de los asistentes disfrutó de la ciudad de Barcelona el fin de semana, lo que ha sido una noticia de gran impacto para Turisme de Barcelona. Una representación del organismo municipal tuvo ocasión de comprobarlo en un recorrido personalizado por los pabellones: excelente forma de comprender el know how, el knowlegde de una industria que está atenta y aprovechando las oportunidades de la evolución de la tecnología. Y con un arrastre de profesionales procedentes de todo el mundo.

Al mediodía del lunes los contadores de afluencia de visitantes ya superaban con holgura los 52.000 visitantes. 

En términos generales la primera jornada de ICE Barcelona culminó con un 'excelente' y la ciudad y sus negocios lo están disfrutando plenamente.