El regreso de Bob Iger como CEO de Disney, tras la turbulenta marcha de Bob Chapek, será clave para aclarar las intenciones de la compañía en este ámbito.
Las expectativas depositadas en el streaming le están jugando malas pasadas financieras a Disney Group. Los ingresos que había previsto por este canal no están cubriendo lo esperado. Una turbulenta sucesión de hechos ha dejado a Bob Chapek fuera de Disney y la presidenta de la corporación, Susan Arnold vuelve a depositar su confianza en el ejecutivo que elevó a la cima a la corporación, Bob Iger.
Esta semana el responsable de la cadena de televisión especializada en deportes, ESPN, Jim Pittaro, admitió que la eventual decisión de entrar en el negocio de apuestas por parte de la emisora está subordinada a la línea estratégica que defina Iger a su regreso.
ESPN mantiene ciertos acuerdos con Caesars Sportsbook y DraftKings en tanto empresas que patrocinan espacios en la parrilla de la cadena.
Según la consultora Eilers&Krejcik Gaming, ESPN aspira a un contrato en materia de Apuestas que le garantice algo más de 300 millones de dólares. Pittaro admite que no se aventuran acuerdos inminentes.