La falta de firma por el presidente en funciones de Brasil deja en papel mojado las iniciativas federales emprendidas por el Senado en los últimos cuatro años, tanto para el ámbito retail como online.
Así pues, las apuestas deportivas perdurarán de momento en el monopolio de la lotería Caixa, aunque habría una posibilidad si es desarrollada una iniciativa legislativa emprendida por Turismo en conjunción con el Fondo Nacional de Salud y la Agencia Brasileña de Promoción de Turismo Internacional, que también las podría facultar para operar apuestas presenciales y online.
Como siempre cuando hablamos de Brasil, habrá que ver con hechos las numerosísimas especulaciones que este mercado potencialmente tan importante pueda generar en los próximos meses, aunque la Presidencia ya estará en manos de Lula Da Silva.