La pelea judicial que mantiene el ayuntamiento por el cierre de dos salas de poker de la ciudad requerirá de sus autoridades destinar cerca de 0'8 millones de euros para afrontar los costes del proceso.
En febrero de 2022 el ayuntamiento revocó las dos licencias existentes, pese a que la legislación de Texas permite este tipo de juego, siempre que éste tenga lugar en 'establecimientos privados'. A juicio del consistorio Texas Card House no reunía tal condición y ordenó su cierre.
La empresa optó por pleitear judicialmente la decisión y la continuidad del procedimiento ha deparado que si el ayuntamiento ratifica su decisión de seguir adelante tiene que depositar la cantidad indicada, para lo cual es preciso que lo apruebe el consistorio.
Medios locales han señalado que la intención de la empresa es seguir adelante en el litigio para impedir el cierre de su 'establecimiento privado de poker'.