Una coalición que reúne a los principales operadores de apuestas deportivas bajo la denominación de Sports Betting Alliance se han manifestado contra la adhesión a los proyectos que otorgarían la explotación comercial de los canales retail y online en exclusiva a los casinos gestionados por las tribus del Estado.
Los cuatro integrantes de la coalición son los operadores más potentes del mercado. Nos referimos a DraftKings, FanDuel, Fanatics Sportsbooks y BetMGM. Todos ellos han asegurado su compromiso para no apoyar las iniciativas emprendidas en materia de Apuestas en el Estado.
Estas iniciativas distinguían inicialmente una regulación tipificada fiscalmente en el 15% del GGR en un fondo fiduciario de reparto de ingresos de apuestas por las tribus, y un adicional 10% también procedente del GGR cuyo destino serían las acciones de carácter social. Una modificación posterior elevó del 15 al 25% los fondos procedentes del GGR que repercutirían en las tribus y con el añadido de la exclusividad comercial para los casinos gestionados por las tribus indias.
Pese a la oposición de los operadores, los impulsores de la iniciativa tienen que reunir casi 875.000 firmas de ciudadanos de California para que el proyecto pueda elevarse a referéndum coincidiendo con las elecciones Presidenciales del 5 de noviembre de 2024.
No es exactamente el mismo caso, pero guarda enormes concomitancias con lo sucedido en 2022 cuando, pese a una extraordinaria a favor de la regulación de las Apuestas que supuso un desembolso hipermillonario para sus promotores, los californianos rechazaron aquella regulación que no contaba con el respaldo de los demócratas. En aquella ocasión los impulsores de la ‘Proposición 27’ eran precisamente DraftKings, FanDuel o BetMGM y aspiraban a una comercialización sin exclusivas; todo lo contrario que la ‘Proposición 26, que limitaba la legalización a las 66 tribus indígenas y a los 4 hipódromos existentes en el Estado.