El jueves probablemente se votará una iniciativa legislativa en el Congreso de Alabama que habilitaría esta posibilidad, aunque antes deberá despejarse cuál es la metodología a presentar para la eventual legalización.
En efecto, Associated Press adelantaba la noticia este fin de semana dándole la relevancia que tiene, puesto que en 1999 la ciudadanía de Alabama rechazó en referéndum la implantación de una lotería propia. Esta es la razón que la iniciativa se observa con gran cautela, si bien se han desatado enormes expectativas como el hecho de cuánto se percibiría fiscalmente para las arcas del Estado y con qué fines.
Por de pronto es necesario que los proponentes validen una de las dos propuestas (o tal vez las dos). Por un lado, enmendar la Constitución de Alabama y permitir el Juego en la misma y, por otro, emprender un proyecto de ley que incluya detales acerca de dónde y cómo regular los casinos que se pretenden impulsar.
La resultante que persigue la propuesta es crear una lotería estatal, permitir las apuestas deportivas retail, online y vía apps para móvil, y habilitar hasta 10 casinos con mesas de juego y máquinas de azar. La propuesta parte del lado republicano, pero cualquiera de las dos propuestas precisará que los demócratas la suscriban.
En el caso de la pretensión de los casinos 7 serían licencias comerciales y 3 se concentrarían en las zonas indígenas. Las apuestas deportivas limitarían su oferta a los casinos en el caso presencial, pero también podrían comercializarse online y a través de móvil.
La creación de la Comisión de Juego de Alabama formada por 6 miembros nombrados por el Gobernador sería otro de los aspectos de la iniciativa.
Cualquiera de las dos propuestas precisará ser sometida a examen de la ciudadanía en referéndum. Habrá que ver si llega para el primer martes de noviembre de 2024.