El GGR absoluto de toda su oferta de juegos obtuvo un crecimiento interanual del 18’8%, según los datos difundidos en la web corporativa de la compañía.
La presidenta y CEO de FdJ, Stéphane Pallez, se congratula de las cifras de ingresos en 2023 que no sólo se apoya en los datos económicos, sino también en la expansión en otras jurisdicciones vía adquisición. Fueron los casos ya comentados en su momento de ZeTurf y la lotería irlandesa Premier Lotteries.
Pallez ha subrayado que la estrategia de la compañía se ha sustentado en fundamentar un modelo extensivo del concepto de juego recreativo; reconocimiento de sus compromisos sociales, y; la repercusión en la Hacienda gala con 4.300 millones de euros y la creación de 56.000 empleos, algo menos de la mitad en el comercio local.
En el documento corporativo del ejercicio FdJ ha remarcado que menos del 2% de sus ingresos procedentes de la lotería online proceden de jugadores de alto riesgo y que más del 10% de su presupuesto de publicidad potencia el ‘juego responsable’.
Son argumentos que en España conocemos bastante bien porque son muy parecidos a los esgrimidos por SELAE y ONCE. FdJ no puede evitar, sin embargo, que desde el sector Casinos se acuse a la empresa de “agresivas políticas expansivas fruto de las ventajas monopolísticas que se le atribuyeron durante el proceso de privatización de una parte importante de su capital”. Entre las acusaciones: que su oferta de juego carece de control de identidad en los puntos de venta, la distorsión que las ventajas administrativas generan entre la competencia y, por supuesto, la filtración de que el Gobierno galo estudia una licencia en exclusiva para operar productos de casino online, circunstancia que está prohibida actualmente.