La estructura orgánica de la Consejería de Presidencia, Justicia e Interior otorga las atribuciones competenciales en la Dirección General de Seguridad, Protección Civil y Formación.
No será necesario un período de transición en el negociado Juego de la Comunidad de Madrid porque Luis Miguel Torres Hernández seguirá desempeñando las responsabilidades de regulación de la materia Juego, si bien ésta pierde definitivamente la nominación al residenciarse en la Dirección General de Seguridad, Protección Civil y Formación.
Además, el Consejo de Gobierno del 30 de junio confirmó el cese de María Rosario Gilsanz Martos como directora del Área de Política Interior y de Ordenación y Control del Juego, cuyas funciones pretendían ser ese eslabón intermedio, presuntamente necesario, entre el Área de Gestión de Juego que encabeza Gracia Martín-Duarte y la titularidad en manos de Luis Miguel Torres.
En cuanto a la Consejería de Economía, Hacienda y Empleo, que sigue siendo un departamento clave para el conjunto del sector madrileño, aunque no directamente en la gestión normativa, es creada la Secretaría General Técnica de Economía, Hacienda y Empleo, y de la Viceconsejería de Hacienda pasan a depender, entre otras, la Dirección General de Tributos.
La continuidad de Torres, que tiene el aval de conocer a ciencia cierta el grado de responsabilidad y credibilidad de los diferentes sectores empresariales del Juego de Entretenimiento de titularidad privada, y evita el obligado ejercicio de aterrizaje en el cargo, no exime la exigencia al director General del Área el compromiso en favor de dotar al Servicio de Juego de la Comunidad de un mayor número de efectivos personales y de la dotación económica que requiere un departamento con un volumen de tramitación documental enorme, y que en los últimos dos años se ha mostrado insuficiente.