La transacción, valorada en 6.500 millones de dólares, fue anunciada a primera hora de ayer lunes 14 de febrero por lo que Blackstone se erige en el poseedor del total accionarial del operador de juego australiano.
El empresario James Packer, que durante años se convirtió en uno de los líderes del sector internacional, confirma definitivamente su adiós a la industria, tras la aceptación por el consejo ejecutivo de Crown de la oferta por el 90'01% del accionariado, ya que el 9'99% restante ya estaba en propiedad de Blackstone desde abril de 2020 en una operación realizada con Melco Resorts & Entertainment.
La cuarta puja por la empresa, que ha significado un valor premium por acción del 32% respecto del valor de cotización que Blackstone ofreció en noviembre de 2021 cuando trasladó su primera iniciativa.
La que se presume última etapa de la operación se relega a la segunda mitad de 2022 cuando los accionistas de la compañía deberán respaldar el acuerdo alcanzado por su actual presidente, Ziggy Switkowski, quien siempre defendió la expectativa de sus accionistas.
Crown Resorts cuenta con diversos establecimientos resorts, entre cuyas facilidades figuran casinos de juego, en diversas ciudades australianas como Melbourne, Perth o Sydney, entre otras.