La transacción por la compra del propietario del popularísimo juego Angry Birds alcanza los 706 millones de euros con un precio de 9'25 euros/acción y 1'48 euros por la opción de compra.
Esta operación no prevé completarse hasta finales del presente ejercicio 2023 porque exigirá superar numerosos placets nacionales e internacionales, particularmente por las derivadas de normativas antimonopolio.
La confirmación acontece a las pocas horas que Sega Europe Ltd recomendara la oferta de compra a los accionistas para hacerse con los activos de Rovio Entertainment Corporation.
Angry Birds inició su comercialización en 2009, erigiéndose en un icono muy popular en libros, películas, dibujos animados y un largo etcétera. En realidad, Rovio decidió retirarlo de la venta a comienzos de 2023 porque estaba afectando negativamente a otros juegos y rebautizarlo como Red's First Flight.
El presidente y CEO de Sega Sammy, Haruki Satomi, confirmó ayer la operación en una declaración pública. "En el contexto del rápido crecimiento del uego por móvil, este mercado adquiere una enorme potencialidad. Rovio es el hogar de muchos trabajadores que tienen la habilidad de apoyar el desarrollo de la industria liderando este segmento con sus grandes capacidades operativas".
En la óptica de Sega Sammy significa acelerar su crecimiento en el mercado global del Juego, elevar el valor corporativo a partir de las sinergias generadas y fortalecerse con las IP globales de Rovio y sus capacidades de desarrollo de juego vía móvil.
El pasado febrero Rovio comunicó una revisión estratégica de su plan de negocio y anunció que mantendría conversaciones preliminares con potenciales interesados en su paquete de acciones. Platyka lo intentó en noviembre de 2022, pero la tentativa no fructificó.