Un estudio de la Asociación de Directoras y Gerentes de Servicios Sociales defiende el papel social de los bares y la hostelería como servicios de proximidad que favorecen las relaciones y evitan la soledad.
Extremadura, Cantabria, La Rioja, Castilla-La Mancha y Asturias son las comunidades que más reconocen la función social de los bares. Por contra, Galicia, Catalunya, Comunidad Valenciana y Navarra acreditarían un reconocimiento menor, según el estudio.
Y es que la ausencia o la carencia se convierte en directamente proporcional a su recuerdo y al deseo de recuperación. Seguramente esta es la razón por la que los habitantes que viven en zonas rurales valoran más que el resto todas las funciones sociales de los bares. Los criterios que cumplen los locales de hostelería como servicio de proximidad incluyen: favorecer las relaciones sociales directas, evitar el aislamiento y la soledad, aportar seguridad al entorno, servicios personales y propiciar la cohesión social y la integración.
Así fue destacado durante la presentación del estudio el pasado jueves 3 de noviembre en un céntrico establecimiento de hostelería de Madrid con asistencia del presidente de Hostelería de España, José Luis Yzuel.
Castilla y León a enorme distancia, seguida de Navarra, Aragón y La Rioja constituyen las comunidades cuyo ratio de habitantes las identifica con un menor número de bares proporcionalmente al total de población. País Vasco, Asturias, Andalucía y Comunidad Valenciana, en cambio, encabezan este ranking por el criterio de mayor número de bares por población.