La iniciativa legislativa más reciente, que buscaba legalizar casinos, apuestas deportivas y loterías, no supera el debate en comisiones dentro del legislativo local.
Hawai y Utah seguirán siendo por lo menos en los próximos dos años las únicas jurisdicciones de Estados Unidos que prohiben toda forma de juego de azar en sus territorios.
Tanto en el Congreso como en el Senado no hay sensación de que la legalización del Juego ayude a Hawai, reconocen diputados y senadores, pero a nadie escapa que millares de ciudadanos/as del archipiélago en el Pacífico viajan a Las Vegas a jugar cada año. Es más, los vuelos desde Honolulu a Las Vegas constituyen una de las oportunidades de ocio más destacadas en Estados Unidos.
Incluso el proyecto de casino en la turística Waikiki murió ante la falta de anuencia de las autoridades de Hawai.