El proyecto de ley impulsado por el senador Irajá Flho fue retirado por su proponente en el curso de una sesión que estuvo marcada por movilizaciones en los aledaños del Senado
La dificultad que afronta este texto legal no sólo radica en grupos políticos y sociales opositores, sino también en el seno del propio Gobierno de Lula. Irajá atendió la petición de sus colegas para retirar el proyecto.
Esta iniciativa de regulación presencial juega con la desventaja de que el juego online iniciará su andadura el próximo 1 de enero con una normativa ya en vigor, pero sigue bajo sospecha de formaciones políticas y sindicatos.
No obstante, Irajá reiteró que el objetivo es crear "un mercado legal que contribuya a un entorno más seguro para los jugadores". Y en esa línea, recogemos sus muy descriptivas palabras:
"Tenemos un dilema viviendo en Brasil. Hay quienes defienden el mantenimiento de los juegos de azar controlados y dominados por el crimen organizado en el país. Y aquellos como yo, que defendemos los juegos responsables en el país que, controlado por el poder público, desarrollado por el Gobierno y fiscalizado por los órganos de control. Y que también pueda recaudar impuestos y poner fin a lo ilícito".
Es una ley que revoca la norma que en 1946 prohibió el juego de azar en todo el territorio de Brasil.