La propuesta es consciente de la condición disruptiva de una legalización de estos juegos de casino “por el impacto en la generación de empleo en los casinos presenciales” por lo que incluye una ‘transición tranquila’ para que su vigencia efectiva no comenzara antes de 2030.
La formación política que ha promovido la iniciativa es Movimiento Democrático, que subraya la intención de “crear un entorno regulatorio más seguro y percepción de mayores ingresos fiscales”.
Se trata de una propuesta en su fase primigenia dentro de la Asamblea Nacional francesa. Prevé una moratoria de3 5 años desde el momento de aprobarse la ley y que el acceso quedaría limitado a ‘nacionales’, aunque seguramente habrá que esperar a ver a que se refiere exactamente bajo este término.
En efecto, plantea vigencia el 1 de enero de 2030, tras lo cual el mercado se extendería a los licenciatarios de casino presencial, que podrían tramitar una licencia online, y a aquellos operadores interesados en acceder al mercado galo.
La iniciativa explica que una aplicación inmediata de la medida causaría efectos devastadores en los empleos del sector presencial de los Casinos, que desde hace años constituye uno de los pilares esenciales de Francia a un nivel de relevancia como el Ejército. Reflexiona la propuesta que los juegos de casino online legalizados debilitaría a los casinos presenciales y a los municipios que los acogen. Todas estas reflexiones permiten entender que la tramitación y su eventual aprobación no prevé ser fácil.
La actual legislación francesa mantiene regulados en el canal online apuestas deportivas e hípicas, y el poker, además de las loterías que dispensan un estatuto especial.