José Luis Merino espera que las medidas planificadoras de la Comunidad descarten de su influencia al sector del Bingo y que éstas también se suavicen respecto de Salones y Locales de Apuestas.
Balance al dramático ejercicio 2020 a cargo del Gerente de ASEJU-Madrid en la revista Joc Privat (JP346/Mayo) en la que analiza las dificultades y el ejercicio de superación implementado por empresas y trabajadores para sobrellevar la dificilísima coyuntura que la Covid creó entre las empresas, pese a que las puertas de la mayoría de salas permanecieron abiertas una vez superado el confinamiento.
Un desarrollo de la actividad que no evitó un descenso del -50'78% en las ventas de bingo en el año 2020. Un dato espeluznante que ASEJU aspira revertir de manera gradual y dentro de las dificultades que siguen existiendo para el desarrollo ordinario de la actividad en el ejercicio 2021.
Pero en ese objetivo ASEJU reclama a la Comunidad herramientas para transmitir oxígeno y confianza a las empresas. En esa línea aboga Merino recuerda la necesidad de tramitar la Orden del 'bingo dinámico' "para ofrecer a las empresas mayor seguridad y control en el juego".
La expectativa de la reforma de la ley del Juego, que figura en la nueva legislatura de dos años, "no puede anular las posibilidades de publicidad y promoción mínimas para los Bingos, que nos deben ayudar a recuperar clientes para superar la crisis tan grave que hemos vivido".
En esta misma línea ASEJU espera que la Comunidad rebaje el tipo tributario del bingo y de las máquinas B, incluyendo la exención del pago de las mismas por el tiempo de cierre.
Este escenario a corto plazo es clave para unas empresas que aguantan, pese a perder dinero, siempre en la confianza que se adivina una expectativa de mejora. "Esperamos que se concrete con regulaciones concretas", señala José Luis Merino.