La patronal española del Bingo teme que la lenta recuperación de los últimos meses quede hipotecada por las perspectivas que presagian un mayor impacto de la crisis económica.
El Comité Ejecutivo de CEJ analizó los datos de facturación a partir del informe expuesto por su presidente, Fernando Henar. Las ventas se situaron hasta el 31 de agosto de 2022 en 795 millones de euros, lo que significa un descenso de -262'8 millones de euros respecto del mismo período de 2019, que es utilizado como referencia pre-pandemia.
Las peores evoluciones en este período se identifican con Castilla y León (-39%), Canarias (-36%), Aragón (-34%) y La Rioja (-30%).
El único escenario que advierte una inclinación favorable se corresponde con el bingo electrónico, cuyas previsiones de crecimiento según CEJ "son muy positivas" al estimar unas ventas a final de ejercicio de 427 millones de euros. Si se alcanzara esta cifra, estaría muy por encima de los 269 millones de euros de facturación en 2019.
Canarias y Comunidad Valenciana prevén ventas en torno a 150 millones de euros cada una; más del 70% del total sólo entre ambas comunidades.
El bingo electrónico está ofreciéndose en 352 establecimientos a través de cutro proveedores tecnológicos: Metronia, Zitro, Degestec y McB.
Por otro lado, CEJ remarca que el bingo electrónico de red no sólo se está jugando en salas de bingo (53%), sino también en salones (47%) y algún casino, destacando Canarias y Aragón.