En realidad, la compañía titular entre otras marcas de Unibet, ya adelantó la adopción de medidas inmediatas para mejorar los ratios de beneficio operacional.
Ningún activo o jurisdicción del grupo empresarial queda exento de ser utilizado para la adopción de alguna medida que contribuya a la reducción de costes, según se desprende de las reacciones emitidas por sus directivos en los últimos días.
Aparentemente la gran penalización en el ejercicio 2022 recaería sobre el cuarto trimestre del año, lo cual es doblemente llamativo porque durante el mismo tuvo lugar el Mundial de Qatar. Las buenas noticias proceden de Países Bajos, donde Kindred accedió en julio de 2022, luego de demorar su entrada por los requisitos de las autoridades regulatorias.
Al cuarto trimestre cabría achacar los costes atribuídos de la compra de Relax Gaming, pero el gran reto del grupo empresarial es el mercado de Estados Unidos y Canadá, donde capta el 4% de sus ingresos. Europa Occidental con el 60% y los países escandinavos el 26%. Los juegos de casino concentran el 54% de todos los ingresos, mientras las apuestas el 41%; el poker representaría el 3% de su facturación.
Por cierto, Unibet es el patrocinador oficial de la Liga de Hockey Hielo (NHL) de Suecia.