La concejal justifica la afectación de los establecimientos de juego en el Plan General de la capital mallorquina asegurando literalmente que “los establecimientos de juego tienen consecuencias perjudiciales para la salud pública, la sociedad y la economía, y por eso hay que tomar medidas que limiten su proliferación”, y dice que “son locales que pueden ser frecuentados por niños y jóvenes, lo que nos alarma todavía más”.
Truyol no rebajó la desmesura cuando lamentó la ampliación de un Salón en la plaza de Santa Pagesa. “La ampliación fue aprobada porque la solicitud se hizo en 2020 y se tiene que aplicar la normativa de entonces”, señala al respecto.
Ya avanzamos en JPnoticias el Nuevo Plan General de Ordenación de la ciudad, cuyo plazo de alegaciones concluyó a mediados del pasado mes de febrero. Ayer, sin embargo, Truyol arremetió de manera feroz a través de un comunicado de prensa, en el cual asegura que “no se abrirán esta clase de locales a menos de 500 metros de zonas verdes o equipaciones docentes, sanitarias, asistenciales, socioculturales, multifuncionales o deportivas”.
El Plan otorga a los locales de juego la misma consideración de restricción de densidad que a los bares y restaurantes por lo que la densidad máxima permitida en el Nuevo Plan es de 3 en un radio de 50 metros y también un máximo de 30 metros de fachada en este mismo radio si se suman bares, restaurantes y salas de juego. Tampoco pueden haber dos contiguos.
SAREIBA se ha pronunciado totalmente en contra de la iniciativa municipal que formula este plan urbanístico y que reproducimos a continuación.