El 31 de agosto fue el último día como titular de la Jefatura de Servicio de Juego, cuya labor se alarga prácticamente a la misma vertebración competencial de la materia a cargo de la Junta de Andalucía.
Vallejo era en el momento de jubilarse el funcionario en el desempeño de las gestiones administrativas de Juego más veterano y longevo.
Durante esta larga etapa ha sido una pieza relevante en la vertebración del vigente marco regulador que Andalucía acredita. Desde la primera ley del Juego, que data de abril de 1986, a los sucesivos y numerosísimos decretos, órdenes, resoluciones...
Son muchas y diversas las sensibilidades que trascienden los respectivos sectores del juego de entretenimiento presencial de titularidad privada. Sin embargo, en Antonio Vallejo Orellana converge un denominador común indiscutible: el reconocimiento al empeño y dedicación que ha caracterizado en todo momento su labor.
Ha sido la persona sobre la cual los sucesivos responsables políticos de la materia mantuvieron y reafirmaron su confianza... Y no han sido pocos en estas casi cuatro décadas porque prácticamente con cada reforma del Ejecutivo autonómico variaba el interlocutor.
Uno de los mayores logros es sin duda habilitar la óptima gestión de los respectivos Servicios de Juego en cada una de las Delegaciones Provinciales de la Junta. No es fácil en una comunidad de las dimensiones geográficas de Andalucía, pero la eficiencia es preciso ponerla en valor, como recientemente testimoniaba la asociación AGARE-Cádiz que reconocía la labor del Servicio de Autorizaciones provincial y hacía lo propio en la figura de Antonio Vallejo.
Todo lo mejor en esta nueva etapa vital para Antonio Vallejo.