El director General de Comercio y Empresa del Govern balear expuso en la Comisión de Economía del Parlament las líneas previstas de actuación del Ejecutivo en materia de Juego en la presente legislatura destacando “la implicación de los operadores privados en la lucha contra la ludopatía“.
Pidió la no demonización del sector y señaló que la reforma de la ley del Juego se está desplegando, si bien con cierto retraso en cuestiones como la informatización, lo que repercute en el Registro de Interdicciones.
Se refirió a la actividad legal que despliegan las empresas operadoras, extremo que reiteró en varias ocasiones. Y en esa línea en velar por el cumplimiento de la norma durante la legislatura. En esas tareas también incluye la difusión en colaboración con el sector de pautas de consumo saludable y en la voluntad de minimizar los daños en personas especialmente vulnerables y con especial a los jóvenes.
Caldés advirtió la dificultad de abordar el Juego Online, que es una competencia estatal. De todas formas, adelantó el impulso de campañas de sensibilización en los centros educativos, entre otras medidas.
Interesante la aportación en el debate del diputado de Vox, Sergio Rodríguez, al señalar que “a la izquierda le gusta prohibir más que a un tonto un lápiz. Hay que incidir en que los menores no entren y no tanto en las distancias. Por esa regla de tres no deberían haber bares, ni tiendas de chuches cerca de los colegios”.