Un establecimiento de juego de Illescas, involucrado en una trama de tráfico de marihuana a gran escala.
La detección de irregularidades en el cobro de premios de apuestas deportivas en un local de juego de Illescas, hasta el punto de confirmar la existencia de al menos 11 justificantes de premio por valor de 60.000 euros con signos de falsedad emitidos a nombre de miembros de la organización y firmados por el responsable de local, sirvió como punto de partida para las investigaciones policiales.
El cabecilla de la organización habría realizado apuestas valoradas en 50.000 euros/día, emitiendo certificados de premios falsos e incluso prestando el establecimiento para conservar el dinero en efectivo, según detalla el comunicado policial.
La estructura de la organización era inmensa. Se valían de inhibidores de frecuencia y vehículos lanzadera, contravigilaban las eventuales pesquisas policiales y dispondrían de la colaboración de un policía local de la ciudad de Madrid.
La investigación policial se centró en un grupo que contaba con plantaciones a cubierto de marihuana en la comarca de La Sagra (Toledo) y en el distrito de Villaverde (Madrid). Una vez recolectada la cosecha, las sustancias eran empaquetadas y conservadas a la espera de su distribución. Los réditos de su venta eran blanqueados en diferentes negocios, entre los cuales la Policía Nacional y Guardia Civil sitúan un Salón instalado en Illescas (Toledo).
Las 23 personas detenidas en Toledo y Madrid están acusadas de delitos de pertenencia a organización criminal, contra la salud pública, blanqueo de capitales, tenencia ilícita de armas y revelación de secretos.
La organización disponía de seis armas de fuego, que fueron incautadas durante la investigación, y otra arma que estaba reclamada por la policía alemana por la comisión de un delito.
Han sido incautados 205 kilos de cogollos y 5.000 plantas procedentes de doce cultivos de marihuana, cinco armas cortas de fuego, una escopeta de cañones recortados, numerosas armas blancas, 110.000 euros en efectivo, cinco vehículos de alta gama, tres inhibidores de frecuencia, un chaleco antibalas, una defensa extensible, un equipo de comunicaciones y distintos elementos destinados al cultivo de marihuana. El bloqueo de cuentas ha significado tomar el control por valor de 1'5 millones de euros.