Son cuatro personas las imputadas judicialmente que venían actuando desde el mes de octubre y hasta el actual mes de febrero.
La investigación policial comenzó en octubre tras ocurrir dos robos con intimidación en locales de hostelería en Getafe y Madrid. Los agentes policiales comprobaron que el grupo actuaba en otras localidades del sur de la Comunidad de Madrid, que les relacionó con otros atracos en Leganés.
El modus operandi era siempre muy similar. Actuaban a primera hora entre las 06 y las 08 horas cuando apenas habían clientes en el interior e intimidaban a los responsables esgrimiendo armas blancas y de fuego.
Asaltaban las cajas registradoras y las máquinas recreativas para sustraer sus recaudaciones. La huida se realizaba a la carrera.