El robo se produjo a punta de revólver a cargo de encapuchados que intentaron amordazar y retirar los móviles a los clientes para que no contactaran con la policía.
Los hechos motivaron una gran movilización de efectivos de Policía Local y Guardia Civil ante la peligrosidad que demostraron los autores en el asalto al establecimiento: apuntaron con revólver a los clientes y otro tanto a la encargada del local.
La detención se produjo poco después de cometidos los hechos, durante la cual se produjo un forcejeo entre los agentes y los asaltantes que no motivó disparo alguno.
Los detenidos fueron puestos a disposición judicial.