Tres detenidos como presuntos autores de 18 robos con fuerza en establecimientos de hostelería y sustracción de 9 vehículos utilizados para realizar estos hechos delictivos, que luego eran abandonados.
La investigación de Policía Nacional y Guardia Civil comenzó en marzo cuando se detectó un considerable aumento de robos con fuerza en bares de la capital y de poblaciones cercanas.
Los ladrones se desplazaban en vehículos que previamente robaban y cuando seleccionaban un local accedían al interior fracturando la puerta de entrada utilizando el propio vehículo robado con la práctica del alunizaje, o bien algún objeto contundente.
Ya en el interior violentaban las máquinas B instaladas en su interior, siempre actuando con el rostro oculto para evitar su identificación; uno de ellos se encargaba de conducir el vehículo, mientras que el resto se apoderaba del dinero y de vigilar la eventual llegada de efectivos policiales.
El Juzgado de Guardia ordenó el ingreso en prisión de uno de los tres encausados.