Según la denuncia de FSC CCOO, la productividad de la ONCE está afectada por el absentismo laboral y los vendedores de Juegos ONCE “son penalizados por estar enfermos”, ya que “no consideran que la incapacidad temporal sea consecuencia de una enfermedad o una alteración de la salud.
Señala que la ONCE no tendrá que pagar los seguros sociales durante la baja médica porque los contratos a personas con discapacidad del 33% o más tienen una bonificación del 100% de la cuota empresarial a la Seguridad Social durante la vigencia del contrato, además de las deducciones fiscales
Igualmente censuran que el salario de la persona enferma es el principal afectado como norma general y que ni Seguridad Social, ni empresa paga los tres primeros días de baja; del 4 al 15 día de baja la empresa paga el 60% de la base de cotización del mes anterior; del 15 al 20 paga la Seguridad Social y; a partir del día 21 aumentan hasta el 75%.
Además, critica que en una plantilla en la que las personas con discapacidad severa y/o patrología crónica no le es permitido desempeñar una actividad laboral distinta a la venta del cupón, ni se realiza una evaluación de riesgos psicosociales personalizada y relacionada con la venta que realiza: exposición a las inclemencias del tiempo, problemas respiratorios, alergias incapacitantes, vendedores/as con movilidad reducida o nula que circulan por las calles.