Advierte la existencia de portales de afiliación que estarían sorteando la legislación holandesa de Juego con alusiones al acrónimo que identifica el Registro de Interdicciones de Juego, CRUCKS.
El principal motivo de preocupación es que las empresas de afiliación pudieran focalizar sus mensajes hacia este tipo de perfiles.
La legislación holandesa estipula que todos los operadores y proveedores autorizados tienen que acogerse a la integración en el CRUCKS para asegurar su licencia por lo que un operador que no cumpla con la legislación en este apartado se juega la continuidad de la licencia.
Precisamente el sistema de autoexclusión holandés no escapa a sucesivas fallas que causan la desconexión temporal del mismo. El más reciente la semana pasada en lo que significó la incapacidad de verificar fiablemente la identificación de la persona.