El balance de la marca sigue siendo un exponente paradigmático de la necesidad imperiosa de disponer de un enorme musculo financiero.
Ya hemos hablado en anteriores oportunidades, pero la referencia de los primeros tres meses de 2024 de una de las dos líderes del mercado devuelven este argumento al primer plano.
Fueron 1.100 millones de euros los facturados por DraftKings entre enero/marzo de 2024, guarismo que significa un incremento del +52’7% interanual. Datos ciertamente estratosféricos que al contraponerlos con los gastos generales (1.400 millones de euros) muestran ese diferencial negativo.
El equipo dirigido por Jason Robins ha expresado tan gran satisfacción que ha modificado el presupuesto de ingresos y de EBITDA ajustado para el ejercicio 2024. Es cierto que la facturación bruta interanual creció en casi 450 millones de euros, pero la resultante arrojó una brecha negativa en el trimestre en torno a los 300 millones de euros.
DraftKings opera en 25 jurisdicciones estadounidenses con apuestas deportivas vía móvil. Igualmente opera iGaming en 5 jurisdicciones, además de Ontario (Canadá) donde ofrece apuestas deportivas e iGaming.