Más de 300 trabajadores/as del juego de entretenimiento de titularidad privada en Comunidad Valenciana denunciaron ante la Generalitat Valenciana un cierre injusto sin razones justificadas que causa la preocupación de 2.000 empleos directos poco antes de conocerse el Auto del TSJCV.
La lluvia no frenó la manifestación en la mañana de ayer jueves que exigió de las autoridades la reapertura del sector tras 85 días consecutivos de cierre. "Somos el único sector diurno que se mantiene cerrado sin justificación sanitaria que lo ampare", denunciaron.
En efecto, el cierre se arrastra desde el 21 de enero. "Nuestra preocupación es compartida por las 15.000 personas que se vinculan laboralmente con nuestro sector de manera indirecta".
Durante la convocatoria se hizo llegar una carta al presidente de la Generalitat en la que critican "la ausencia de diálogo" del Botànic con los trabajadores/as. "Hemos intentado contactar en varias ocasiones con Ximo Puig y con el conseller de Hacienda sin éxito".
A los medios de comunicación presentes, Vicente Contreras recordó que "los protocolos y medidas aplicadas en los establecimientos de juego van más allá de lo estrictamente obligatorio: control de temperatura, instalación de mamparas de separación, garantía de mantenimiento de las distancias físicas, y ventilación constante que renueva el aire, entre otras. Todos los empleados hemos recibido formación específica y en cada sala hay un responsable que garantiza el cumplimiento de todas las medidas sanitarias. Existe un control exhaustivo sobre las personas que acceden a los locales, lo que garantiza el control de aforo y la trazabilidad ante eventuales contagios que desde el inicio de la pandemia no se han producido en absoluto".