La reglamentación madrileña se convierte en una singularidad en el mapa normativo autonómico al mantener estas dos lagunas en su ordenamiento, que sí son una completa realidad en la práctica totalidad de comunidades.
Fueron dos reivindicaciones sectoriales que en su momento hallaron acomodo en la mayor parte de Comunidades Autónomas coincidiendo con otros cambios reglamentarios en las características técnicas de las B en Hostelería, entre ellas el jackpot a 500 euros para las máquinas recreativas con premio limitado en este tipo de locales, que efectivamente sí sería materializado en la madrileña.
Pero en aquellos proyectos de reforma vividos antes y durante la etapa de Fernando Prats la Comunidad de Madrid se quedó atrás respecto del resto de jurisdicciones, y el billetero de 50 euros y las partidas a 3 segundos quedaron para una mejor ocasión en detrimento de otras tipologías de máquinas destinadas a establecimientos de juego que sí fueron desarrolladas técnicamente de manera muy significativa. Transcurrida ya más de una década, ambos puntos perfilan seguir siendo asignaturas pendientes de las empresas operadoras madrileñas especializadas en producto B para Hostelería.
Los proyectos normativos de reforma que la Comunidad tiene en marcha, singularmente el decreto de Planificación, podrían ser una oportunidad para resolver estas dos carencias concretas. Fuentes consultadas por JPnoticias, sin embargo, no perciben demasiado factibles estas eventuales incorporaciones por la coyuntura del momento, incluso más allá que el hecho de ser un matiz técnico pudiera requerir de la Administración madrileña su reenvío a la Comisión Europea con la consiguiente prolongación del proceso de tramitación de la norma.