La entidad que agrupa a los trabajadores de Salones de Juego de Comunidad Valenciana denuncian "el ataque constante a un sector que aporta empleo estable y de calidad".
Reacción a la anunciada presentación de una Iniciativa Legislativa Popular (ILP) sobre los salones de juego porque según Compromís se abrirán locales a menos de 850 metros de los colegios cuando la ley justamente prohibe esa apertura a una distancia inferior.
UTSAJU recuerda que durante los años de gobierno del Botànic esta asociación pidió numerosas reuniones con las autoridades autonómicas que nunca fueron atendidas. "La ley ha deparado el cierre de salones, pese a carecer de sanciones o incidencias con el consiguiente despido de trabajadores, en especial mujeres".
UTSAJU lamenta que Compromís no se fije en juegos como los de la ONCE o SELAE "que pueden venderse a la puerta de una escuela y ser comprados sin control alguno. Por contra, los salones disponen de controles de acceso, superan inspecciones y están sometidos a control constante por la Administración; el nivel de colaboración con las inspecciones en absoluto".