La nueva ley del Juego de Aragón era la protagonista de la mesa, pero si del Juego hay que hablar “en la nueva ley más de la mitad de la oferta comercial que corresponde al juego público y semipúblico no se aborda al carecer el Gobierno de Aragón de competencia sobre ella”, recuerda José Antonio Rubio (AESA-Aragón).
Rubio fue analítico sobre el texto aprobado. Discriminó los pros y los contras de la norma. Sin embargo, que se aludiera a los juegos de ONCE y SELAE no gustó a una aparte del auditorio que no comprendió estas referencias cuando realmente son rivales comerciales de un mismo mercado, pero con una serie de prebendas regulatorias, tanto en cuanto a comercialización como en materia de publicidad. Que se siga achacando al juego presencial y al online privados y regulados aspectos relacionados con publicidad y promoción no puede por menos que sorprender. En el primer caso porque las normativas autonómicas prácticamente nunca lo permitieron y en el caso del online porque hay una férrea limitación que nadie puede ignorar, dado que desde el Ministerio de Consumo lo reiteran con fruición.
Sánchez Colilla fue contundente: “SELAE y ONCE quieren quedarse con el monopolio del Juego y por eso siempre intentan desplazar al Juego Privado”. El directivo de CEJ lamentó el incumplimiento de los artículos 34 y 35 de la ley estatal del Juego de 2011, según los cuales tienen que equipararse juegos públicos y privados en materia de publicidad y fiscalidad”.
José Antonio Rubio recordó esta circunstancia: “La ley del Juego regula el juego presencial privado. El Estudio presentado por Consumo destaca que el 97% de los españoles que juega lo hace a loterías y que de éstos únicamente el 81% lo hace exclusivamente a loterías, pero en las noticias siempre nos extrapolan a los juegos del sector privado”.
“Cuando se habla de control de acceso a salones de juego, el mejor tipo de control es el de acceso a Salones, En este ámbito hemos mejorado”, explicó Rubio. “Sin embargo, la ley abre la puerta a terminales de juego de la ONCE en hostelería, lo que supone en torno a 4.000 puntos de venta más de juego. Irá a más porque ONCE y SELAE pueden hacer más publicidad y al sector presencial privado se nos veta esta posibilidad·, señaló.
Los dos exponentes del juego presencial privado recordaron el largo período de colaboración con entidades y Administraciones, además de las claves de formación, educación y sensibilización de potenciales riesgos. “Somos conscientes de la necesidad de proporcionar a la población herramientas. Pero no olvidemos que la mayoría de la población practica el juego seguro y sin patología, que es nuestro perfil de cliente. La prohibición sólo contribuye a lo ilegal, que precisamente no tiene control alguno”.